Los fundamentos de nuestro trabajo se basan valorar y respetar las diferencias individuales y reconocer en cada persona su aporte, aceptando la diferencia en lugar de la deficiencia.

FANDA ofrece el servicio de Apoyo a la Integración Escolar adhiriendo a la Ley de Educación Nacional N°26.206/06 que establece que la obligatoriedad escolar en todo el país se extiende desde la edad de cinco años hasta la finalización del nivel de la Educación Secundaria, correspondiendo a cada jurisdicción asegurar el cumplimiento de la obligatoriedad escolar a través de alternativas institucionales, pedagógicas y de promoción de derechos, que se ajusten a los requerimientos locales y comunitarios, urbanos y rurales, mediante acciones que permitan alcanzar resultados de calidad.

Que la Resolución CFE N° 155/11 dispone que se considere esencialmente la evaluación pedagógica y el análisis de las barreras al aprendizaje y a la participación para la admisión, continuidad y egreso de los/as alumnos/as con discapacidad en las escuelas de educación común y especial.

Que por la Resolución N° 867/MEGC/13 se modificó la Resolución N° 3773/MEGC/11 estableciéndose el Reglamento para el Desempeño de Acompañante Personales No Docentes para todos los alumnos/as con discapacidad en todo establecimiento educativo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; que la inclusión de niños y jóvenes con discapacidad constituye un desafío que debe construirse día a día por lo cual se requiere de cambios y adaptaciones del sistema educativo y su contexto.

FANDA fundamenta la aplicación funcional del servicio de Apoyo a la Integración Escolar en línea con la Convención internación de los Derechos de las Personas con Discapacidad (Ley 26.378) que en su Artículo 24 expresa que se reconoce el derecho de las personas con discapacidad a la educación inclusiva en todos los niveles en igualdad de oportunidades. Para hacer efectivo este derecho las personas con discapacidad deberán recibir los apoyos personalizados y efectivos que fomenten al máximo el desarrollo académico y social, de conformidad con el objetivo de la plena inclusión, en el marco del sistema general de educación. Asegurar que la educación de las personas, y en particular, los niños y las niñas ciegas, sordas y sordociegos se imparta en los lenguajes y los modos y medios de comunicación más apropiados para cada persona y en entornos que permitan alcanzar su máximo desarrollo académico y social.

Para ello, es necesario brindar el apoyo pedagógico al proceso de integración escolar de niños y jóvenes con necesidades educativas derivadas de déficit intelectual, físico, trastornos generalizado del desarrollo, trastornos severos del lenguaje y otros, que puede, con apoyo, integrarse a la escuela común en todos los niveles del sistema educativo:  Inicial, Primaria, Secundaria y Adultos.

Los servicios educativos de apoyo a las instituciones de educación común tienen por objeto ofrecer los recursos específicos para la evaluación y la atención de alumnos con discapacidad, transitorios o permanentes, cognitivas, conductuales, sensoriales o motoras dentro del ámbito de la educación común, en todos sus niveles. Son los articuladores del proyecto educativo de estos alumnos y su desarrollo. Se plantea como un compromiso conjunto y una tarea en colaboración con actores de otras áreas.

El abordaje de la familia y su inclusión en el proceso es fundamental para la integración escolar, el acompañamiento, la participación y el compromiso del grupo familiar, puede facilitar o limitar el desarrollo del mismo.